Un abuelito de 89 años, llamado Derlin Newey, estaba con un problema de deudas enorme, todo en medio de la pandemia en Estados Unidos. Por esa razón se puso a trabajar como repartidor de pizzas.
Una familia de hispanos, los Valdez, conoció su historia luego de que el adulto mayor les llevara sus pedidos en varias ocasiones. Es así que sus integrantes organizaron una colecta en secreto, recolectaron 12 mil dólares y le dieron una tremenda sorpresa al señor.