¡El Callao está de fiesta y su gente lo sabe! Octubre es un mes de mucha fe y devoción. Que tras tres años de no realizarse la procesión del “Señor del Mar”, hoy los chalacos inundan las calles de fervor y misericordia en la procesión de su Santo Patrono.
Muy bien dice la frase, el chalaco es: “Amable, tiene buen ritmo, alegre, sentimental, hincha del boys y sobre todo es devoto del Señor del mar”
El santo chalaco vio interrumpido sus más de 250 años de recorrido por una pandemia. La última vez que esto pasó fue en 1879 que no salió por la guerra con chile. Y es que las pesadas andas de más de dos toneladas son cargadas por 24 hermanos, de todas las edades.
Ser digno de este honor es el deseo de muchos que pocos tienen el privilegio de llevar en hombros a su amado señor. La pasión de la fe, puede despertar mil emociones.
El poder de la fe
Los rostros de los fieles, muestran la expresiones de súplicas en busca de una petición, que se cumpla un milagro.
Uno de esos milagros, le ocurrió a la señora Nancy Pacheco del barrio de Monteagudo. Ferviente devota que sufria una enfermedad terrible en la piel , Eritrodemia psoriásica, que al ser curada prometió acompañar al “Señor del Mar” en su recorrido.
Desde la fecha han pasado más de 30 años “Estuve muy enferma, estuve a punto de acabar con mi vida, me quería morir, porque mi enfermedad no tenía solución, yo sangraba. Mi cara sangraba, mis manos sangraban. Es como una costra grande que a un mínimo esfuerzo sangraba”.
Estoy eternamente agradecido poder cantarle el día de hoy, porque también he sufrido del Covid y él me ha curado. Es estar nuevamente con salud y vida. Por eso en esta canción decirle, gracias.
Otro de los milagros del Señor del Mar es la señora Gladys. Nos cuenta que es devota de my niña y asegura que su cáncer fue curado gracias a su devoción.
“Tuve cáncer y ya han pasado más de 11 años del cual estoy curada”
Estoy muy emocionada, para mí, él es grande, es nuestro padre, él es todo para nosotros, por eso un consejo: Acérquense más al Señor del mar, que todo lo puede.
Chim Pum Callao, en su salsa
La orquesta Zaperoko, le rindió tributo al “Señor del Mar”, poniendo la salsa dura en el emblemático club del Sport Boys del callao una canción dedicada al santo chalaco.
“Tu que has salvado al callao en tiempos no lejanos
Calma de nuevo las aguas que diario enfrentamos
Calma mi vida y la tempestad
Señor del mar, señor del mar…”
y así como el chalaco venera, también baila. En el callao, la imagen más representativa es la del Santo Patrono.
“Es para nosotros una fiesta, mirar a nuestro patrón, encontrar en ella esa paz, ese sentir, esa emoción.”
“Lo que queremos nosotros para el Callao, es que el Señor toque con sus manos para alejarnos de todo lo malo y acercar a las personas de bien porque el chaalaco es bueno”
Y es cierto, los chalacos son personas de bien, apasionados y orgullosos de sus símbolos.
Así que esta festividad sigue pasando de generación tras generación. Moviendo a miles de fieles que desde las calles del primer puerto: Inunda de fe, de dolor y de solemnidad a una ciudad injustamente señalada por unos malos elementos pero que en su historia encierra honor, gloria y tradición.