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Estuvo aquel día que, seguro, quedará en la historia del deporte peruano. Era el 11 de octubre del 2013 en Toronto y Pedro Pablo de Vinatea cumplía, a carta cabal, su función de Embajador del paradeporte, con la finalidad de sumar los votos que elegirían a Perú como la sede de los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos del 2019.

A menos de una semana del inicio de los Juegos Parapanamericanos, Pedro Pablo se encuentra entusiasmado con la cantidad de paratletas que integran la delegación. “Hace 4 años, en Toronto, no llegábamos ni a 20 y hoy somos 139. Somos el anfitrión y debemos aprovechar esa súper oportunidad, porque somos una delegación relativamente nueva y para muchos serán sus primeros Juegos y, sin duda, van a haber medallas, por lo menos, en lo que respecta al Para bádminton”, agregó.

Pedro Pablo de Vinatea no quiere desesperarse, sabe que la competencia es difícil y que una medalla caerá por su propio peso. “No prometo nada, quiero llegar a una final o una semifinal suelto, sin deudas, sin la mochila con piedras, para inspirarme y jugar lo mejor posible”, agregó.

Como Embajador de Lima 2019, su misión y responsabilidad, durante todos estos años, “ha sido comunicar de los Panamericanos y Parapanamericanos y también  de que el deporte paralímpico no solo es un espectáculo, sino también una fuente de inspiración enorme”, señaló.

El parabádminton se realizará en el Polideportivo 3 de la Videna del 29 de agosto al 1 de septiembre.  “Invito a todos para que compren las entradas y estoy seguro que los escenarios van a estar llenos y que la barra será una motivación para jugar nuestros mejores partidos y tener un gran desempeño”, finalizó Pedro Pablo de Vinatea.

Fuente: Andina