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En Chile, una mujer fue víctima de una gran estafa. La señora, identificada como Verónica Vejar, vecina de la ciudad de San Bernardo, depositó más que su confianza en una gitana que conoció en un local comercial.

 

La misteriosa Lola del Carmen Stancovich se dedicaba a la lectura del tarot en el centro de su comuna. “Andaba mirando y me meto a una galería. No creía, pero era curiosa de estas personas”, señaló la afectada al programa ‘Hola Chile’.

 

Entonces, tras asistir a varias sesiones, la gitana se ganó su confianza y le pidió que le dé todo su dinero, ya que, según la estafadora, debía ser purificado. “Era un dinero de una propiedad que vendí. Había que purificar ese dinero. Al momento de hacerlo, a mí ya no me iba a pasar ningún mal”, recordó.

 

“Según ella, mandaba espíritus al banco que resguardaban que nadie me quitara la plata. Luego llegamos al local, me pidió el lavatorio que le hizo llevar y me lavé la cara. El agua salía salada, y eso era por el mal que me hacía a mí una supuesta mujer que me tenía odio”, agregó. Ella le dejó su dinero y fue la última vez que la vio en meses.

 

Luego de hacer la denuncia se inició un procedimiento policial por estafa. “La fiscalía intentó llegar a un acuerdo y que la gitana pudiera devolver parte del dinero, sin embargo, ella siempre se negó. Asistió a las audiencias, pero nunca pidió disculpas, nunca tuvo la intención de devolver un peso y fue condenada a 41 días de prisión”, detalló.

 

Lo peor es que la gitana no llegó a cumplir la condena, ya que, al no tener antecedentes, recibió luego un pena remitida, que consiste en que debe ir a firmar un libro de requisitorias todos los meses por un año. La víctima aseveró que existirían más víctimas de la gitana.

 

 

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