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No soportó las severas quemaduras y a poco más de haber sido quemada viva a bordo de un bus de servicio público, Eivy Agreda dejó de existir. Con apenas 22 años sus sueños quedaron truncos para siempre por un hombre obsesionado que no imaginaba la vida sin ella. Todo ocurrió el último 24 de abril, Carlos Javier Hualpa Vacas la siguió hasta un bus de servicio público, subió y siguió hasta ella para rociarle combustible y prenderle fuego luego huyo con Eivy envuelta en llamas. 

La joven de apenas 22 años  tenía que ser sometida a por lo menos 10 operaciones y luego de su sexta intervención quirúrgica, los doctores del Hospital Almenara auguraban un buen futuro para Eyvi Ágreda. A la joven se le había retirado el 40% de la piel afectada, cuando ella llegó al centro de salud con el 60% del cuerpo quemado.

Según explicaron los especialistas en su momento, los médicos retiraban el tejido de sus muslos para expandirlo y colocarlo en las partes dañadas. El Instituto de Salud del Niño de San Borja aseguró que podría prestar las instalaciones para cultivar la piel de Eyvi y así esta técnica también pueda ser usada en el tratamiento.

En tanto su hermano, James Ágrega se hizo presente en el Hospital Almenara, nosocomio donde Eyvi fue sometida a las operaciones, para mostrar todo su pesar. James precisó que su hermana tuvo que ser inducida al sueño para que no sufriera más de lo debido en las operaciones de piel. Su cuerpo no resistió el shock y falleció. James recalcó también que la lucha va continuar porque el sujeto que atacó a Eivy cumpla cadena perpetua.