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La madrugada del 27 de octubre, Rosa tomó un taxi saliendo de una reunión en San Juan de Lurigancho hacia su casa en Ate Vitarte, ella se sentó en la parte trasera del auto y durante el camino dirigió al taxista para llegar a su destino. Ella le recomendó tomar la autopista Ramiro Prialé para llegar más rápido, pero este es el último recuerdo que tiene, pues horas después despertó en La Herradura, al lado de una discoteca.

 

Ella no se explica cómo se quedó dormida, por eso al despertar le preguntó a Anderson López Aracca qué le había hecho y le reclamó sus pertenencias. Inmediatamente bajó las lunas del carro y empezó a pedir ayuda, pero el taxista reaccionó a arrancar el carro y manejar desesperadamente lejos de ese lugar.

 

A pesar de que ella le pidió que la dejara, asegurando que no lo denunciaría, este hombre la retuvo en contra de su voluntad hasta llegar a los pantanos de Villa, donde Rosa amenazó con lanzarse, a lo que el chofer por fin respondió deteniendo el auto. Él le contó que había empeñado su celular por unos tragos en la discoteca, por eso le prestó el suyo para que llame a alguien que la recoja, pero ella llamó al 105 y, luego de forcejear con él, logró escapar.

 

 

 

Busca ayuda

 

En la comisaría no le prestaron atención y, al no poder lograr nada por la vía legal, ella llega al set de “Tengo Algo que Decirte” para denunciar al taxista, esperando que ninguna chica tenga que pasar por esto en nuestro país.

 

“Pido al Ministerio de la Mujer que me apoye porque quizás no soy la única, porque este sujeto se dedica a hacer esto, tiene muchas denuncias como esta, tiene por resistencia a la autoridad. Entonces yo me pregunto, ¿qué esperamos?, porque yo en verdad le agradezco mucho a Dios que estoy viva en estos momentos”, contó la víctima entre lágrimas.