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Diana fue criada en la comunidad nativa de Caimito, ubicada en la ciudad de Pucallpa, Ucayali. Desde pequeña, su sueño era convertirse en enfermera para ayudar a las mamás de su sociedad.

A los 18 años, viajó a Lima en busca de oportunidades para hacerse de un futuro.

Para salir adelante, Diana solo contaba con las herramientas de trabajo que heredó de su madre: el arte del tejido, la pintura y el bordado en tela. Ella tomó este conocimiento y lo usó para progresar y darles a sus tres hijos lo que necesitaban, hasta que sufrió un accidente. “Estuve en coma en el hospital durante 15 días, pero nunca me he vencido por eso”, comenta.

Al recuperarse, Diana continuó con su lucha por seguir sacando adelante a su familia. Y fue en ese momento cuando más ayuda necesitaba, que conoció a Mibanco y le aprobaron el préstamo para comprar sus materiales y a través de su trabajo, exponer el arte de su comunidad; pero no solo eso, sino que continuó con sus estudios de enfermería.

A los 39 años, Diana trabaja desde su casa e impulsa su propio negocio junto al apoyo de sus hijos.

“Siempre soñé continuar esta carrera. Terminé tres años, egresé y ahora estoy haciendo el trámite para mi título”, nos cuenta muy alegre.

Mibanco: 25 años comprometidos con el desarrollo de los emprendedores peruanos

En Mibanco tienen el propósito de “transformar vidas y escribir historias de progreso”. Por eso, desde hace varios años se preocupan por el desarrollo integral de más peruanos, con lo que se han convertido en un agente de cambio “para construir una sociedad más inclusiva, igualitaria, diversa y con mejor educación financiera”.

A lo largo de los últimos 25 años, Mibanco otorgó más de 18 millones de créditos, logrando que una de cada cuatro personas en nuestro país acceda por primera vez a un crédito. Una muestra del compromiso que tienen por “seguir nivelando la cancha”. Además, reinventaron su Crédito Mujer y lo hicieron más flexible para incluir financieramente a más mujeres.