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Tras un paciente seguimiento, la División de Robos de la Policía Nacional capturó a una banda de falsos colectiveros que asaltaba mujeres que abordaban el vehículo en la avenida Javier Prado. Esta organización estaba liderada por una mujer y contaba hasta con 35 denuncias.

Julissa Alaluna Winder, de 31 años, era la cabecilla de esta banda criminal, junto con Alfredo Espinoza Carhuajulca y Gerson Josías Evangelista, ambos con antecedentes criminales. Todos fueron detenidos el 26 de febrero cuando estaban a punto de asaltar a una empresaria.

Una de sus víctimas narró la modalidad en la que actuaban estos delincuentes. Indicó que la cabecilla se hacía pasar como pasajera, lo que le inspiró cierta confianza para abordar el vehículo. Luego, le pusieron un arma en la cabeza y la propia Alaluna le arrebató sus pertenencias. Cuando se acercó a hacer la denuncia, se dio con la sorpresa que había más de 10 denuncias contra este supuesto taxi colectivo.

Tras recoger un total de 35 denuncias en cinco comisarías los últimos dos meses, la Dirincri empezó a rastrear la ruta de estos falsos colectiveros, quienes solían recoger a sus víctimas en concurridas intersecciones de Javier Prado y las abandonaban en el puente del Hipódromo, en Salamanca o en el puente Las Américas, en San Luis.