Presidente mexicano suaviza postura sobre España, Madrid rechaza descalificaciones

CIUDAD DE MÉXICO, 10 feb (Reuters) – El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, matizó el jueves sus declaraciones sobre pausar las relaciones con España al aclarar que en la víspera no habló de romperlas, mientras el gobierno de la nación europea rechazó más tarde de forma tajante las críticas del mandatario hacia sus empresas.

El gobernante generó dudas el miércoles sobre el futuro de los lazos bilaterales con uno de los mayores inversores en el país latinoamericano, al anunciar su deseo de ponerlos en «pausa» hasta que termine su mandato en 2024, aunque el gobierno español informó horas después que no había recibido ninguna comunicación oficial al respecto.

«No es una ruptura de relaciones y no es contra el pueblo español, es nada más una propuesta respetuosa, fraterna, por los abusos y agravios cometidos en contra del pueblo de México y nuestro país», afirmó López Obrador el jueves en su rueda de prensa diaria.

No obstante, reiteró sus críticas a compañías españolas a las que ataca con frecuencia. Entre ellas están la energética Iberdrola, la petrolera Repsol y la constructora OHL -ahora OHLA-, a las que señala de «saquear» a México mediante contratos públicos suscritos con administraciones que precedieron la suya.

La postura inicial del presidente respecto a los vínculos con España fue motivo de interminables especulaciones, especialmente porque la cancillería mexicana no aclaró en qué consistía exactamente.

Los renovados ataques contra las autoridades y compañías españolas se producen mientras crece la presión sobre un plan de López Obrador de reformar el sector eléctrico local para otorgar mayor poder al Estado, en detrimento de empresas de energías renovables, algunas de ellas españolas.

En respuesta, el Ministerio de Asuntos Exteriores de España emitió el jueves un comunicado en el que expresó su deseo de mantener unas relaciones basadas en el respeto mutuo y trabajar para reforzar los lazos bilaterales, aunque también condenó los dichos del gobernante mexicano.

«El gobierno de España rechaza tajantemente las descalificaciones realizadas por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, en los últimos días contra España y las empresas españolas», indicó.

Además, en un comunicado previo, informó que el titular de esa cartera, José Manuel Albares, sostuvo el miércoles una llamada con su homólogo mexicano, Marcelo Ebrard, la cual «transcurrió en el buen tono habitual entre ambos».

Según datos oficiales difundidos por el gobierno del país europeo, más de 175,000 españoles viven en México y cerca de 30,000 mexicanos residen en España, que es el segundo inversor y cuenta con 7,000 empresas en el país latinoamericano.

La inversión española se eleva por encima de los 70,000 millones de euros (unos 80,190 millones de dólares) y la mexicana en España supera los 25,000 millones de euros.