El señor Mama está aprovechando el calor del verano para hacer negocio. Y es que se fue a la zona de Atahualpa, en el Callao, para poner unas piscinas callejeras.
A través de un módico pago, los vecinos de la zona pueden ingresar a estas piscinas para refrescarse y divertirse a más no poder.
Por si fuera poco, el señor Mama también da clases particulares de natación a sus peculiares clientes. Todo esto será registrado por un divertido reportero.