Miles de peruanos piensan que los venezolanos que migran al país les quitan las posibilidades de empleo, pero la situación que ellos viven es más compleja de lo que se imaginan.
Grecia dejó hace tres años Caracas para conseguir un mejor futuro en el Perú. La difícil situación que atravesaba su país motivó a esta joven venezolana a migrar y tratar de conseguir un trabajo formal en tierras peruanas no fue fácil. “Ha sido complicado al principio. Primero regularicé mis papeles y luego con un contacto que tenía de referencia en la empresa que trabajaba en Venezuela, me refirieron aquí”, explicó Grecia.
Ella estudió ingeniería de sistemas, pero aquí tuvo que pasar por diferentes cargos para lograr, a punta de mucho esfuerzo, ser parte del staff de inteligencia de negocios en una empresa consultora, situación que resulta complicada para muchos de sus compatriotas.
“Era difícil por el tema de conseguir papeles como extranjero y porque necesitabas un contrato de un año. Que te den un contrato directo sin un período de prueba era muy difícil, incluso para los nacionales, pero como soy profesional en lo que hago y mis referencias, pude lograrlo”, relata Grecia.
En su paso por el mercado laboral peruano, Grecia ha escuchado más de una vez “que los venezolanos quitan puestos de trabajo a muchos peruanos” y esto es lejano a la realidad .Según la planilla electrónica del Ministerio de Trabajo de 3.5 millones de trabajadores en el sector privado solo 0.17% son venezolanos.
“Alcanza las 300 o 400 personas en cada uno de estos rubros mensualmente y en consecuencia la posibilidad de que pueda ser una competencia para el trabajador peruano es bastante baja”, explica Flavio Ausejo, profesor de La Escuela de Gestión Pública de la UP.
De 380 mil venezolanos que radican en nuestro país, tan solo 60 mil cuentan con el permiso temporal de permanencia. Para el especialista, esto fuerza a muchos de ellos a recaer en la informalidad. “En realidad la mayoría trabaja en el mundo de la informalidad, pues tienen la necesidad de genera ingresos rápidamente y deben empezar a generar dinero en fuerzas de venta o comercio ambulatorio”, detalla Ausejo.
Grecia está convencida de que las capacidades de muchos venezolanos en áreas muy específicas pueden sumarse al mercado laboral peruano y así apoyar a sus familias e impulsar la economía peruana.